Erick Kammerath y Daniel Rodríguez Carreiro analizaron el trasfondo de los proyectos revolucionarios como el Gran Reseteo, exponiendo también sus perspectivas de futuro.
Autor: garciacarmonaam

El chantaje moral consistía en que, si se sacrificaba toda la nación con tal de salvar una sola vida, cada persona era condecorada como héroe de guerra, siendo que su mayor acto de patriotismo era consumir Netflix y comer medialunas mientras Occidente sucumbía en los últimos reductos de libertad que le quedaban.

Carreiro y Kammerath abordarán dos de las mayores amenazas del Gran Reseteo, contra el principio de subsidiariedad y el derecho natural a la propiedad privada (condición “sine qua non” para que haya libertad).

Andrés Vergara hizo radiografías interesantes sobre la entrada en acción de Guillermo Lasso y el estado del correísmo, a cuento de los resultados de los comicios presidenciales ecuatorianos del pasado 11 de abril.

Andrés Vergara hará un análisis en clave pos-electoral, sobre los posibles escenarios de acción política ante la llegada de Guillermo Lasso a la presidencia de Ecuador.

Luego de haber tenido 3 presidentes en los últimos 4 meses, el electorado conservador parece tener como candidato favorito al ingeniero Rafael López Aliaga, líder del partido Renovación Popular.

Su futuro, y el de nuestra patria local, son historias que le tocarán escribir con la tinta de su trabajo y con la pluma de su virtud, bajo la mirada atenta de quienes lo vemos y tomamos nota para inspirarnos o evitar sus errores.

De una u otra forma, se ha obtenido un patrón de diseño que identifica un movimiento con unos principios definidos, como puede ocurrir con otros movimientos políticos e ideológicos.

La libertad económica no depende de la democracia moderna tal cual la conocemos en sí, sino de otros estándares morales, sociológicos y espirituales.

Acosta Burneo y Silar analizarán sobre las oportunidades y debilidades de los sistemas democráticos actuales a la hora de asegurar una amplia libertad económica

Normalmente, cuando se habla del mérito, solo se señala el final de la escalera sin tener en cuenta el punto de partida.

El mundo pospandemia será uno en que cada individuo tenga su propio concepto de alma y felicidad, pero en el que las masas se guiarán al unísono del globalismo digitalizado.

Los políticos encubren esto, ya que, si se cambia el modelo les tocaría asumir una realidad en donde este conocimiento que poseen no vale nada porque se pierde al difundirse públicamente tanto para el interés del propio Estado total, o se destruye la estructura que lo permite.