La presidente del gobierno, María Chivite, celebró el lunes un acto preelectoral en los jardines del Palacio de Navarra, acompañada por todo su gabinete y altos cargos. Chivite llevó a cabo un balance absolutamente positivo de su presidencia y exento de la más mínima autocrítica. Si algo ha ido mal, la culpa es de Ucrania y de la pandemia, como si la pandemia o la guerra de Ucrania sólo le hubieran afectado a Navarra.
La presidenta Chivite elude toda autocrítica en su balance de legislatura https://t.co/xVr02NmRg5 pic.twitter.com/0ONqafeu5f
— Diario de Navarra (@DiariodeNavarra) March 14, 2023
La pregunta respecto al balance de la presidenta es si vive en la negación, si vive fuera de la realidad en la planta noble de Palacio, o si trata de tomarnos el pelo. Desde luego el balance de legislatura del navarro medio resulta muy distante del de la presidenta.
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Canal de Navarra: paralizado. Y van dos legislaturas.
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AVE: paralizado. Y van dos legislaturas.
Paro registrado: de los 31.002 parados de julio de 2019 a los 32.364 actuales.
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Paro EPA: de una tasa de paro del 7,58% en el segundo trimestre de 2019, a una del 10,09% en el cuarto trimestre de 2022. De ser la comunidad con menos paro en el segundo trimestre de 2019, a ser la sexta en el cuarto trimestre de 2022.
Malestar tras el paso por el servicio de Urgencias https://t.co/bBXsYYSlpw
— S Médico Navarra – CESM (@SMedicoNavarra) March 14, 2023
Sanidad: las listas de espera disparadas y la percepción de la calidad del sistema público desplomándose según los datos del Barómetro Sanitario.
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El riesgo de pobreza en Navarra es similar al de los peores tiempos de UPN y cerca del doble que el de los mejores tiempos de UPN.
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Respecto a la seguridad en las calles, casi es mejor que les remitamos a su propia experiencia y sus propias sensaciones que a las estadísticas que les pudiéramos mostrar.
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La libertad educativa ha retrocedido a la par que los resultados académicos durante cuatro años más. Como siempre que gobierna la izquierda, su propósito es que las familias no puedan elegir la educación con libertad. Y cuando desaparece la libertad de elegir, desaparece también la calidad.
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¿Pero y respecto a la violencia de género? Ahí es donde un gobierno de progreso tiene que echar el resto y marcar la diferencia, al menos en teoría. La mala noticia es que el año pasado las denuncias por violencia de género crecieron un 44% en Navarra. Respecto a 2019, cuando se contabilizaron 1.957 denuncias, en 2022 se ha subido hasta las 2.352.
Las denuncias por violencia de género aumentan un 44,3 % en Navarra https://t.co/fO8ZU6iIKb
— EITB Noticias (@eitbNoticias) March 10, 2023
¿Y la fiscalidad? Hoy mismo, según el informe Panorama de la Fiscalidad Autonómica y Foral 2023, sabemos que los navarros con 20.000 euros de renta (no precisamente por tanto ricos) son los que más IRPF pagan de España. Un navarro con 20.000 euros de renta, gracias a nuestra fiscalidad de progreso, tiene 392 euros menos en el bolsillo para pagar la cesta de la compra que un madrileño, pero también 299 euros menos que un riojano, 252 menos que un aragonés y 232 menos que un vasco.
Los navarros con 20.000 euros de renta, los que más IRPF pagan de España https://t.co/m1UU6PYAYf pic.twitter.com/3fHerVwqpa
— Diario de Navarra (@DiariodeNavarra) March 15, 2023
¿Pero es que no va nada bien en esta Navarra chivitesca de progreso? Bueno, la afiliación a la Seguridad Social ronda las 300.000 personas, aunque llevamos ya un tiempo estancados en esas cifras, las cuales son un récord histórico. El problema es que sólo son 18.000 afiliados más que en 2007, con el pequeño matiz de que la población navarra era entonces de sólo 602.000 habitantes frente a los 661.000 actuales. Dicho de otro modo, desde 2007 tenemos 59.000 habitantes más pero sólo 18.000 afiliados a la Seguridad Social más. Es decir, la afiliación crece pero crece a causa del aumento de la población, y además crece mucho menos de lo que crece el empleo, por lo que sube el paro aunque crezca la afiliación.
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Por si fuera poco no termina de entenderse que Chivite empiece su campaña publicitándose en los jardines del Palacio de Navarra, utilizando para su provecho particular este recurso, en vez de su casa o la sede del PSOE. Claro que, como posó con todos los consejeros y altos cargos de su macroarchicarogobierno, efectivamente toda esa multitud es cierto que no cabe fácilmente en cualquier sitio y que en los jardines del Palacio hay bastante espacio.
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Socialismo, hambre y piojos.
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