Ayer Tafalla vivió un episodio más en favor de la prosperidad de las clases sociales, de la liberación de la mujer y de la defensa del medio ambiente. O sea, que una panda de salvajes destrozaron los cristales de un Telepizza que estaba a punto de ser inaugurado. Además dejaron unas pintadas con mensaje para que se viera que no eran meros gamberros. Eran idealistas, héroes, gente con un propósito: “kapitala apurtu” (destrozar el capital) y “txakurra kampora” (perro fuera). No es por otra parte algo demasiado inusitado y llueve sobre mojado, ¿cuántos ataques ha sufrido por parte de la izquierda abertzale el Burger King de Mercaderes? Pues eso.

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Pero contra este tipo de violencia no hace falta educar a los niños, aunque sea para que sepan que Telepizza es una franquicia y que cuando se destroza un local no es Telepizza quien paga las pedradas, sino el emprendedor que ha pedido un crédito y seguramente hipotecado su casa para lanzarse a la aventura. Aquí sí que hay violencia organizada, o por lo menos violencia con un trasfondo ideológico. Sólo que ese trasfondo ideológico no es el que se combate, sino el que manda. No nos preguntemos a qué colegio han ido los autores de este ataque. Qué establecimientos frecuentan. Qué grupos de música escuchan. A quién siguen en Twitter. Que se vaya la Universidad de Navarra, que se vaya la Volkswagen, que se vaya Burger King, que se vaya hasta Telepizza. Bueno, sí, preguntémonoslo: ¿en qué colegio habrán estudiado los zoquetes del “kapitala apurtu”? Preguntémonos también qué sociedad será más prospera: ¿una en que predominen los “txabales” que atacan establecimientos comerciales u otra en que predominen los que abren establecimientos comerciales? ¿Cuál de las dos sociedades estamos construyendo en Navarra? Por si no fuera suficiente el infierno fiscal, las trabas administrativas, el papeleo, la burocracia… tenemos encima en Navarra una prima de riesgo añadida y diferencial que se llama la imbecilidad de la tribu radical.

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Comentarios (1)
  1. Urko Jon says:

    Yo no creo que este ataque tenga nada que ver con una ideología política. Para mí está claro que fue la típica pelea de pizzería. Se está criminalizando a unos pobres txabales que lo único que hicieron fue comer alguna pizza de más. Propongo tres cosas:
    1. Que el gobierno de Nafarroa haga una manifestación para defender el honor de los txabales de Tafalla
    2. Que le encargue a la madre de unos de ellos un plan de corrupción de menores y pornografía infantil que sea obligatorio en todos los colegios.
    3. Que algún partido amante de los asesinatos presente a esa madre al congreso de los diputados para que salga elegida y promueva la prohibición de pizzerías fuera de Italia.
    Pienso que con estas tres sencillas medidas quedaría todo solucionado

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