PAGA,vota y CALLA

 

En la transición tuvo cierto éxito este lema lanzado desde el tradicionalismo político. Su objeto , alertar de los peligros de la partitocracia que se instauraba en 1978.

Se sentaban las bases de un sistema en el que los comités de partidos iban a anegar todos los resortes de poder del nuevo régimen como así ha sido.

 

Sin embargo casi nadie en aquel momento quiso  escuchar la mas mínima crítica a nuevo sistema. La comprensible  ilusión y la esperanza de lo nuevo fueron la tónica.

El régimen de partidos parecía en ese momento un remake del rey  Fernando VII en su primera etapa como  “el deseado” . Así fue durante muchos  años.

Tuvo que llegar la crisis para que los españoles se plantearan si  otras vías de representación política, de autoridad y de eficacia eran posibles.

Hoy la crisis nos obliga a repensar  hasta donde debe llegar el estado de bienestar, que gastos comunes podemos mantener y quien debe gestionar cada ámbito.

Hoy sabemos que es una necesitad vital  poner límites al poder, que no basta la legitimidad de origen y que es necesaria la legitimidad en el diario ejercicio del poder.

Hoy somos conscientes que la  metástasis de la partitocracia ha corrompido todos los ámbitos de la esfera pública sin separación de poderes , elevando a los mediocres e ignorando el principio de mérito y eficacia.

Hoy sabemos que los comités de partido han colocado a sus gentes en todos los ámbitos bajo el amparo de representar la “ideología” de su sector de  votantes.

Hoy nos preguntamos si eran los mas  aptos para ello y nos respondemos  que -salvo excepciones- en  general no lo eran.

Hoy nos acordamos  que desde 1985 – es solo un ejemplo entre muchos – los partidos entraron de lleno a  las cajas de Ahorros (y en lo judicial y en lo administrativo,etc…) bajo el amparo de leyes hechas por ellos mismos.

Ahora  que la marea ha bajado, los partidos están desnudos frente a la sociedad civil .

Han sido pésimos gestores del dinero público y sobre todo han engordado un estado para tener mas poder, mas dinero para gestionar y repartir  y colocar a mas gente.

¿De verdad creíamos que la zorra podía guardar el gallinero?.

1 estrella2 estrellas3 estrellas4 estrellas5 estrellas (7 votos, media: 4,00 de 5)
Cargando...

Entradas relacionadas

Dar de baja